El gran regreso de Indian al flat track no es ninguna coincidencia. En los primeros días de la marca, a principio de los años cincuenta, los rivales de Indian ya mordían el polvo en los dirt tracks americanos. ¡Os ofrecemos un vistazo a medio siglo de carreras literalmente feroces!
Por Charlie Lecach.
Photos : colección C.L. & archives Indian
Al principio, el objetivo de Indian, como pioneros de la industria del motociclismo, era demostrar que montar en motocicleta era mejor que ir en bici o a caballo. Como resultado, los primeros años se enfocaron en demostraciones de fiabilidad, resistencia, eficiencia en el consumo de combustible y habilidad a la hora de subir colinas. La velocidad quedaba en segundo lugar, pero no por mucho tiempo porque en 1903, dos años después de que se lanzara la marca de Springfield, se inauguró el primer circuito flat track en Nueva York. Poco después, en 1908, se abrieron dos circuitos grandes en Los Angeles. Uno era Agricultural Park y el otro Ascot Park.
Apenas un año antes, también en L.A., Jack Prince inauguró el primer motódromo. Estos board tracks de madera y de forma oval, como voluminosos velódromos, tuvieron tanto éxito que el promotor inglés pronto los estaba construyendo por todos los Estados Unidos. Así que las carreras de board track empezaron a tener más éxito que las carreras de dirt track, consideradas menos espectaculares.
El riesgo inherente a este nuevo deporte acabo siendo fatal. Una sucesión de accidentes culminó en 1912, cuando dos pilotos Indian y seis espectadores murieron en el rocódromo de Newark, Nueva Jersey. Después de esto, los circuitos empezaron a ser nombrados como “murderdromes” (pistas de la muerte), situación que empeoró con la llegada de nuevo motor de competición de ocho válvulas.
Al contrario de lo que podría pensarse, estos “ocho-válvulas” también participaron en algunas carreras de flat track. Charles “fearless” (sin miedo) Balke ganó algunos eventos en mayo de 1914 en Chicago, a los mandos del manillar de una de estas rapidísimas máquinas. Otra idea equivocada es que las dirt tracks eran para carreras de 25 millas y nada más, ya que la “Dodge City 300 Miles” se desarrollaba en un circuito de dos millas.
Glenn Boyd corrió con su Indian no menos de 150 veces seguidas en este circuito, ganando el título en 1914. Dos años más tarde, el entusiasmo general por el board track se evaporó, favoreciendo en su lugar las carreras de flat track. La Primera Guerra Mundial pospuso todas las carreras y no se volvieron a retomar hasta 1919. Esta vez, el piloto Gene Walker ganó de tacada cuatro de los nueve campeonatos nacionales de dirt track. Por desgracia, los accidentes mortales siguieron aumentando la percepción de que este deporte y, también en general, las motocicletas eran peligrosas. En 1922, la Motorcycle and Allied Trades Association – el precursor del AMA – intentó imponer motores de 500cc en cambio del estándar de 1000 cc. Sin embargo, esto no evitó que campeones como Ray Weishaar y Gene Walker se mataran en 1924. La cilindrada se redujo aún más a 350 cc, pero las carreras empezaron a perder su atractivo y sus espectadores. Es más, estas máquinas venían y volvían a la fábrica y tenían poco que ver con las populares Indian de producción comercial, así que el eslogan de “Gana el domingo, vende el lunes” ya no valía. De hecho, la Gran Depresión de los años 30 y la caída del mercado de 1929 no le puso las cosas fáciles a la fábrica de motocicletas de Springfield. Afortunadamente, la American Motorcycle Association (AMA) creó una nueva categoría a finales de 1933, inicialmente pensada para amateurs sobre motocicletas de serie: la Class C. Esto impulsó a Indian a producir su nueva Sport Scout al principio de la temporada de 1934. Pensada para un público general, también podía competir en esta categoría y resultó ser muy efectiva contra sus contrincantes. Además de cientos de pequeñas carreras locales que ganaba cada domingo, la Sport Scout batió el récord de la Class C gracias a Rollie Free, que llegó a alcanzar 179 km/h (111,55 mph) en 1938. En cuanto a Ed Kretz, conocido como “Iron Man”, ganó la carrera de 200 millas en Savannah, en 1936, y en Daytona al año siguiente. En 1937, 1938 y 1940, fue el ganador absoluto de los Nacionales de 100 millas y de la carrera de una milla en el dirt track oval de Langhorne. La Segunda Guerra Mundial paró todas las competiciones otra vez, y no se retomaron hasta 1947. La competencia empezó a superar a la Sport Scout, así que Indian lanzó la 648 Big Base Scout.
Aparte de ganar las 200 Millas de Daytona, en 1948, las prestaciones de la marca no estaban a la altura porque insistía motores monocilíndricos y twins verticales, supuestamente tan buenos como los de importación británica. Aun así, con su relación de peso y potencia, los modelos Scout eran indudablemente las mejores máquinas del flat track, tal como demostraron los tres miembros del Indian “Wrecking Crew”. Bobby Hill, Ernie Beckman y Bill Tuman eran pilotos profesionales además de excelentes mecánicos: ellos sabían que en carreras de velocidad tenían mejores posibilidades al manillar de sus respectivas Nortons. Sin embargo, en el los dirt track, donde los cambios de desarrollo y los frenos de ese tipo no estaban permitidos y donde el par motor era tan importante como la potencia, nada era mejor que las Scouts 750. Los resultados hablan por sí mismos: Bobby Hill ganó la placa “Number One” del AMA en 1951 y 1952, mientras que su compañero de equipo Bill Tuman ganó en 1953, dándole a Indian su primera victoria AMA nacional. Pero como sabemos todos, la compañía volvió al flat track en 2016 ¡así que la historia no termina aquí!
¡VUELTA A LOS CIRCUITOS!
Indian no ha escatimado en nada a la hora de garantizar su éxito en el campeonato americano de flat track, tanto en las motocicletas como en los pilotos que las dominan. Después de un magnífico debut en la temporada 2016, en 2017 la Indian FTR750 ya se está forjando un nombre, batiendo a todos sus contrincantes. Ahora que ya han terminado las 18 carreras de la temporada, podemos ver claramente los resultados: con diez victorias, el piloto Jared Mees se ganó la placa “Número Uno” del AMA, seguido por su compañero de equipo Bryan Smith, con cuatro victorias. Esto implica que Indian ha ganado 14 de una total de 18 carreras en una espectacular primera temporada que marca un retorno sin precedentes al dirt track, ¡después de 63 años!
Deja una respuesta